martes, 9 de enero de 2007
Turn it on again
El primer tema que recuerdo haber escuchado de Genesis fue Home by the sea.
En pleno comienzo de la adolescencia escuchar ese sonido, esos teclados, esa batería, me convirtió en fan incondicional.
El tiempo, que se escapaba como agua entre las manos, me llevó a recorrer toda su discografía.
Si el rock sinfónico tuvo alguna vez razón de ser, la tuvo en Genesis.
Algunos de sus discos (Selling England by the pound, The lamb, Second Out, Abacab, etc.) son la banda de sonido de muchos momentos de mi vida.
En los ochenta y los noventa se la criticó, denigró e ignoró por demasiado inglesa, demasiado blanca, demasiado millonaria. Yo aún la reverenciaba. Como hoy.
Enterarme que vuelve a tocar luego de tantos años ha logrado emocionarme.
Como cada vez que la escucho.
Como muestra escuchen esto (Houston 1978).
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4 comentarios:
Querido Sergio:
Bienvenido al otro lado de la blogósfera: el de los hacedores. Seguramente disfrutaré de tus textos. Y atento que ya te haré publicidad en mi blog. No servirá mucho, pero sé que te pondrá contento.
Un gran abrazo,
Cristian
Hola Sergio, recorriendo un poco la blogòsfera, como dice Cristian, me encuentro con està idea que has llegado a plasmar.Te deseo suerte.Alguna vez sin que fuera Gènesis mi grupo favorito, vos y Mario lograron que los escuchara, no soy un especialista, bien sabès que de lo ùnico que màs o menos puedo hablar seriamente es de deportes, de fùtbol especialmente,y cad vez que suena algo cerca referente a ellos, me vienen a la memoria recuerdos inolvidables, que màs allà de las distancias, las broncas y los enojos, que quedaràn grabados, al menos para mì, por el resto de mi vida, bien sabès de lo que hablo.esperarè tus aportes en cuanto al deporte, para entrometerme y decir alguna barbaridad de vez en cuando.Te tiro un tema que sè bien podràs tratar con altura, y que puede llevarnos a aportar cosas, ¿Còmo creès que se trato el tema de Ortega en los medios?Un abrazo.
Me alegra poder leerte aquí. Iba a felicitarte por esta apertura pero me doy cuenta ahora que el felicitado debo ser yo.
Gracias queridos Cristian y Octavio.
Gracias también Gabriel por tus palabras, escribiré algo sobre deportes seguramente. Con respecto a Ortega, a quien Cristian sé que no quiere mucho, no tengo demasiado para decir, así que no diré nada.
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